Cuando miramos de frente a la muerte significa que podemos tener mayor plenitud de vida.
Y sin embargo hablamos muy poco de la muerte. Los medios de comunicación la han popularizando para ganar audiencia, y en muchas ocasiones apelando a nuestro morbo. Pero la muerte sigue siendo un tabú, quizá el ultimo tabú dentro de nuestra sociedad.
El debate sobre la muerte debería estar presente en las escuelas y en nuestro día a día. Si hay algo tan certero es el hecho de que todo lo que vive, algún día morirá. Pero hasta que muere alguien cercano a nosotros, entonces no sabemos como afrontar la perdida, ni sabemos como vamos a atravesar el duelo.
El duelo marca el periodo que posibilita transformar el dolor excesivo de la muerte de un ser querido, en algo que podemos asumir que es mas llevadero.
La cualidad principal que nos permite transitarlo es la resiliencia.
Con el paso de los meses, a medida que vamos transitando las diferentes etapas del duelo como son el enojo, la negación, etc. Empezamos a tener momentos de respiro. Y nos vamos encontrando con lo que queda de la vida, que es muchísimo. Aunque sabemos que nada será como antes, pero podemos levantarnos mas fuertes y con mas recursos.
Hoy en día el paradigma del duelo ha ido cambiando con el tiempo y por suerte, se ha diferenciado del luto. El luto es un camino en el que el sufrimiento se convierte en un dolor que se instala y difícilmente se transforma y puede alargarse para toda la vida.
El duelo no es solamente un camino de dolor, y tampoco es interminable. Después de un duelo bien trabajado salimos reforzados.
Pero un buen proceso de duelo requiere mucho amor, amor hacia uno mismo, y hacia quienes nos rodean.
"Sin amor no hay duelo sino tragedia"
Pero cuando perdemos a alguien que amamos, queremos evitar al máximo el contacto con el dolor.
Emprender nuevas relaciones y experiencias puede amortiguar el dolor. Esto no significa que hemos olvidado a esa persona, que no te duela no significa que vas a olvidar.
El vínculo que tenemos con las personas que amamos jamas se rompe. Y necesitamos fe, sabiduría y confianza para elevarnos por encima de lo que ya no podemos ver y tocar y entender la única verdad: que nuestro ser querido esta más vivo que nunca, mucho mas cercano en nosotros que cuando estaba físicamente.
No te atormentes creyendo que ya deberías sentirte mejor, tus tiempos son tuyos. El peor enemigo del duelo es que no te quieras y te culpes por la muerte de quien ya no está.
Tendríamos que tener un entrenamiento cotidiano para atravesar los procesos de dolor por pérdidas y no necesariamente porque alguien se nos muera.
Asociación civil que recomiendo:
Cisprac.org
Es una asociación civil que general posibilidades para la participación activa y corresponsable en el desarrollo de las comunidades en sus diferentes ámbitos. Fomentando alianzas entre las personas y las organizaciones civiles que están trabajando en en esas soluciones para mejorar nuestra comunidad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario