
1.- Lo que das es lo que recibes.
La biblia dice: "practiquen el dar, y se les dará... porque con la medida con que ustedes midan, se les medirá en cambio (Lucas 6:38)
2.- Ayudando a los demás, te ayudas a ti.


El que ayuda a otro recibe una ayuda muy importante: ayuda para aceptar nuestras propias limitaciones.

Y esa sensación positiva de poder echar una mano es muy gratificante.

5.- Aumenta tu autoconfianza.
Quien ayuda lo hace porque puede y sabe hacerlo, se siente útil.
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