Inteligencia Emocional: una clave para la vida

Por Ana Giorgana


La inteligencia emocional nos lleva a una vida exitosa.


La Inteligencia Emocional se refiere a la “capacidad de una persona para manejar una serie de habilidades y actitudes que tienen que ver con el conocimiento, manejo y autocontrol de vida emocional”.


La Inteligencia es un término acuñado por Goleman en un libro del mismo nombre. Para este autor la Inteligencia Emocional incluye varios elementos que se relacionan con:

1.- Conciencia de sí mismo: lo que se refiere a poder distinguir nuestros estados emocionales.

2.- Capacidad para identificar, expresar, controlar las emociones y los sentimientos. De esta manera podemos darles una salida constructiva.

3.- Habilidad para controlar emociones impulsivas y posponer la salida de estados emocionales descontrolados.

4.- Manejar la tensión y la ansiedad que se experimenta en momentos en los que las emociones son intensas o perturbadoras.

Para Goleman y la tesis que plantea en referencia a la Inteligencia Emocional el éxito en la vida se encuentra no solo en el Coeficiente Intelectual sino en el Coeficiente Emocional, es decir, la Inteligencia Emocional.

La Inteligencia Emocional se refiere a una serie de habilidades que están en relación directa con diversas habilidades para la relación con uno mismo, la pareja, la familia, la vida social, el trabajo y el éxito en la vida. Dentro del ámbito de las competencias de un individuo, se le conoce como Competencia Emocional.
"Dentro del ámbito de las competencias de un individuo, se le conoce como Competencia Emocional".

Conciencia de uno mismo: reconocer y conocer los propios estados internos.

Conciencia Emocional: reconocer las emociones propias y los efectos tanto a nivel personal como en el nivel relacional y social.

Valoración de la propia persona: reconocer las propias debilidades y fortalezas, y sobre todo, ponerlas al servicio de una mejor calidad de vida.

Confianza en uno mismo: Reconocer y aceptar una valoración personal y de nuestras capacidades y habilidades. Es decir, contar con un autoconcepto y autoestima bien cimentadas.

Autorregulación: Se refiere a la capacidad para manejar situaciones de estrés, ansiedad, conflictos que se presentan en cualquier ámbito del quehacer humano. Utilizar los recursos internos a nuestro favor y del medio ambiente.

Confiabilidad: poseer la capacidad y confianza en nuestra integridad y valoración, así como de resolver nuestra circunstancia de vida.

Adaptabilidad: Contar con la flexibilidad suficiente para afrontar los cambios. Dar solución de una manera creativa a situaciones diferentes. Lo único permanente en la vida es el cambio. La vida nos enfrenta a diversos cambios evolutivos y de circunstancias laborales, familiares, de pareja y en lo social.

Desde mi punto de vista, esta adaptabilidad se relaciona con cerrar ciclos y mantener una forma de libertad emocional. Generalmente ponemos resistencia a las diferentes fases que vamos viviendo y caemos en un estancamiento que impide nuestra adaptabilidad y salud emocional.
Desde mi punto de vista, esta adaptabilidad se relaciona con cerrar ciclos y mantener una forma de libertad emocional.

Motivación: utilizar aquellas emociones que permitan y faciliten el logro de los diferentes objetivos en nuestra vida.

Motivación de logro: establecer los criterios de excelencia para la mejor consecución de los logros.

Compromisos: contribuir de manera constructiva a las metas y objetivos personales, familiares y de una organización.

Iniciativa: autonomía.

Optimismo: mantener una actitud positiva en relación a llevar a cabo los objetivos, independientemente de los diferentes obstáculos que pudieran presentarse.


En el área social la Inteligencia Emocional se refiere a:

Empatía: capacidad para comprender los sentimientos, necesidades y emociones de otros.

Comprensión de los demás: entender los sentimientos, puntos de vista y manera en que los demás perciben el mundo.

Orientación al servicio: estar atentos para en la medida de lo posible ayudar y colaborar a resolver las necesidades de otros cuando así se requiera.

Aceptar la diversidad: comprender que las personas no podemos sentir y reaccionar de la misma manera. Por ello, es tan importante la valoración personal, la de los demás y el respeto a las diferencias. En los diferentes ámbitos encontrar el punto en el que las diferencias pueden ser una ventaja para un grupo, equipo, familia, pareja.

Comunicación: ser claro, específico y asertivo.

Colaboración: capacidad de trabajar en grupo para una meta en común. Solución de conflictos. Habilidades de liderazgo.

Equilibrio y conocimiento personal es una forma de vivir bajo la meta de la Inteligencia Emocional.
"Equilibrio y conocimiento personal es una forma de vivir bajo la meta de la Inteligencia Emocional".


La Inteligencia Emocional es un ingrediente muy importante dentro de nuestras vidas. Cuando no estamos conscientes de su importancia nuestra manera de reaccionar se torna caótica, acartonada o poco flexible.

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